viernes, 29 de febrero de 2008

REPRESENTANTE ADVENTISTA TESTIFICA ANTE AUDIENCIA DEL CONGRESO NORTEAMERICANO


Los trabajadores estadounidenses pueden seguir los dictados de su conciencia y cumplir con sus requerimientos laborales bajo la nueva legislación sobre libertad religiosa en los lugares de trabajo propuesta, dijo el abogado James D. Standish, representante de Asuntos Legislativos de la Iglesia Adventista del Séptimo Día durante su testimonio ante una audiencia del Congreso de los Estados Unidos.

"Ya suficientes trabajadores estadounidenses han sido humillados y despreciados por ningún otro delito que el permanecer fieles a su comprensión de los requerimientos divinos", dijo Standish, que se unió a otros cinco testigos en la audiencia del pasado 12 de febrero que reintrodujo la Ley de Libertad Religiosa en los Lugares de Trabajo (Workplace Religious Freedom Act) "Nuestros valores nacionales y humanidad común nos piden que brindemos una modesta y sensata protección bajo esta nueva ley, y que no debemos demorarnos más".

Legislación similar en el estado de Nueva York ha hecho que desde 2002 haya un descenso "dramático" de denuncias de discriminación religiosa en los lugares de trabajo, que mientras tanto, ha aumentado en el país un 83 por ciento entre 1993 y 2006, dijo Standish.

Hasta el momento, una enmienda de 1972 a la Ley de Derechos Civiles requiere que los empleados realicen "los arreglos razonables" a menos que esto inflija "dificultades indebidas" sobre el empleador u otros empleados. En general, estos arreglos se relacionan con la observancia de días sagrados como el sábado y la utilización de indumentaria religiosa como la kipá, el turbante o el velo.

De sancionarse, esta ley podría cubrir huecos legislativos que permiten que los juzgados interpreten esas frases clave como les parezca, dijo Standish ante los diputados presentes, miembros de la Subcomisión de Salud, Empleo, Trabajo y Pensiones. Añadió que estos estándares claros son cruciales para salvaguardar a los trabajadores de despidos o negativas de trabajo "arbitrarias".

La fonoaudióloga judía Judy Goldstein, de Nueva Jersey, testificó que le negaron un empleo en una escuela secundaria pública porque el empleador no quiso respetar su observancia del sábado.

Zainab Al-Suwaij, directora ejecutiva del Congreso Islámico Norteamericano, que abandonó Irak en 1991 después de participar en un fallido alzamiento contra Saddam Hussein, no fue contratada porque se rehusó a quitarse el velo durante las horas de trabajo.

Tanto Goldstein como Al-Suwaij testificaron que de existir la ley, habrían sido contratados.

El diputado Robert Andrews (demócrata de Nueva Jersey), presidente de la subcomisión preguntó si el incremento de los derechos de los empleados no incrementarían el potencial de juicios irracionales. Otros miembros preguntaron si los juzgados deberían fallar a favor de los empleados que se rehúsen a cumplir "las funciones esenciales" de sus empleos (por ejemplo, un chofer musulmán que se rehúse a hacer entregas de bebidas alcohólicas).

"La ley no constituye un cheque en blanco para que los empleados exijan cualquier tipo de arreglo en nombre de la religión y lo reciban", dijo el panelista Richard T. Foltin, Director Legislativo y Legal de la Secretaría de Gobierno y Asuntos Internacionales del American Jewish Committee.

Standish está de acuerdo, ya que no hay razones documentadas que indiquen que la ley justificará denuncias irrelevantes, dijo.

La panelista Helen Norton, profesora asociada de la Facultad de Leyes de la Universidad de Colorado y ex funcionaria del Ministerio de Justicia durante el gobierno de Clinton, dijo que la ley podría interpretarse de manera equivocada para proteger a un trabajador que se rehúsa a prescribir anticonceptivos porque el control de la natalidad se halla en conflicto con sus creencias religiosas.

Michael J. Gray, socio de un estudio de abogados internacional, expresó preocupaciones similares, temiendo que la ley produzca "discriminación religiosa a la inversa". Bajo esta ley, dijo, podrían llegar a protegerse, por ejemplo, los derechos de miembros del Ku Klux Klan.

La ley ya es adecuada, añadió Gray, y citó el caso del fallo a favor del chofer adventista de UPS Todd Sturgill.

Foltin expresó que esas preocupaciones están apartando al Congreso del tema en cuestión, que es "la necesidad real de remediar el daño que enfrentan los empleados religiosos observantes todos los días.

Standish dijo que el amplio apoyo que tiene el proyecto de parte de miembros de ambos partidos es prueba de cuán significativo es. Más tarde, expresó a ANN que espera que las "negociaciones positivas" lleven finalmente a "sancionar esta ley".

Fuente: Adventist News Network

No hay comentarios:

Publicar un comentario